A los seres humanos nos encanta encontrar formas de ahorrarnos tiempo y trabajo a la hora de desempeñar cualquier acción, ya sea recoger una habitación, construir una casa o hacer un trabajo para la Universidad.
Intentamos buscar formas, triquiñuelas y atajos para poder terminar el trabajo lo antes posible, pero sin que esto signifique disminuir la calidad del resultado final.
Vamos, que somos vagos (y muy ingeniosos para algunas cosas) por naturaleza.
Cualquier trabajo posee su propio proceso natural para conseguir el mejor resultado posible. Sin embargo, tenemos a nuestro alcance muchas herramientas (entre ellas, nuestro intelecto) que nos permiten atajar el camino para poder llegar antes a nuestro objetivo.
¡Cuánto tiempo nos habremos ahorrado gracias al maravilloso Copy-Paste! ¿Verdad?
Ataja el camino en tus campañas de mailing
Crear una newsletter para tus campañas de mailing no se iba a quedar atrás en esto de atajar el camino (y nunca mejor dicho).
De nuevo, el maravilloso Copy-Paste te puede ahorrar muchísimo tiempo y trabajo a la hora de montar una newsletter, pero debes tener en cuenta varios detalles para no meter la pata. ¡Hoy te los contamos!
Muchas veces queremos acortar tiempo y ser más eficientes duplicando una newsletter en lugar de crear una desde cero. Realmente, este paso es el más común y el más sencillo para no perder la estructura o el diseño de una newsletter, pero hay que tener mucho cuidado cuando se realiza.
¡No queremos cometer ningún fallo que convierta nuestra campaña en un desastre total!
Son muchos los errores que podemos cometer al duplicar una newsletter en Mailchimp: olvidarnos de cambiar el título, la foto… ¡o incluso el enlace de nuestro CTA!
Para poder ayudarte a conseguir una newsletter perfecta duplicando otra que tengas hecha con anterioridad, en este post te damos 8 claves imprescindibles que tienes que tener en cuenta para salir airoso en este proceso.
No te preocupes si no utilizas la misma herramienta que utilizamos nosotros. Estos consejos que te damos en forma de checklist te van a servir independientemente del gestor de correos que utilices para tu empresa. Lo importante aquí es que no te saltes ningún paso y que hagas check en todos ellos para conseguir un resultado estupendo.
Al final de este post te dejamos un enlace directo para que puedas descargarte este Checklist para no meter la pata al duplicar tu próxima newsletter.
¡Pero no seas tramposo o tramposa! No te vayas directamente al final y lee todos los consejos que te damos a continuación.
1. Copy-Paste. Duplica la newsletter que quieras
El primer paso es sencillo: duplica la newsletter que quieras.
¿Cómo duplico mi newsletter en mailchimp?
¡Muy fácil!
Solamente tienes que acceder al dashboard de tus campañas, seleccionar la campaña que quieras duplicar, clicar en la flechita que aparece a la derecha y seleccionar la opción “Replicate”.
La elección de la newsletter que quieras duplicar dependerá de la nueva newsletter que quieras crear. (Y sin haberlo deseado, nos ha salido un pareado).
Efectivamente, en función de tus intereses duplicarás una newsletter u otra. Nos explicamos:
- Si te interesa la segmentación, duplicarás una newsletter que posea la misma lista de contactos a la que quieres enviar la nueva.
- Si por el contrario te interesa más el diseño o maquetación de una newsletter anterior, te interesará duplicar una newsletter con ese diseño para tu nuevo envío.
Todo se basa en tus intereses y prioridades para atajar el camino de la forma más eficiente y rápida posible.
¿Ya tienes tu newsletter duplicada?
¡Seguimos!
2. Cada cosa por su nombre
Lo primero que debes hacer tras duplicar la newsletter que hayas escogido es cambiarle el nombre.
De igual modo que tú te llamas Antonio y no te llaman Manuel, tus newsletters deben seguir la misma regla.
Una vez tengas duplicada tu newsletter, accede a la edición de la misma y cambia el nombre de la campaña en la parte superior de la ventana.
Te recomendamos que escojas un nombre con el que puedas identificar claramente a qué newsletter te estás refiriendo.
Llámala por el nombre de la campaña, el contenido de la newsletter, el objetivo que quieras conseguir… Sigue los mismos criterios que has aplicado al resto de newsletters para nombrar a tu nueva creación.
Créenos cuando te decimos que este paso es muy importante, porque luego se crean confusiones y corres el riesgo de enviar la newsletter que no toca a los contactos correctos o viceversa.
3. Modifica, si es necesario, la lista de contactos que la van a recibir
¡Este es un punto muy importante!
En todos los puntos te decimos lo mismo, pero la verdad es que este puede ser uno de los más importantes.
Imagínate crear una newsletter súper chula, muy currada, de la que dependa que consigas parte de tus objetivos de marketing o de empresa. Ahora imagínate que se la has enviado a los contactos erróneos… ¡Qué desastre!
Recuerda siempre editar los “Recipients” de tu newsletter y seleccionar aquella audiencia y segmentos o tags que más te convengan para alcanzar tu objetivo.
En este apartado también puedes seleccionar (o deseleccionar) la opción de personalizar tu newsletter con el Tag “Nombre”.
Recuerda que para que aparezca el nombre propio de la persona en la newsletter, deberás escribir en el cuerpo del texto la etiqueta correspondiente. En nuestro caso es *|FNAME|*.
4. ¿Quién envía la newsletter?
Una práctica muy común que se lleva a cabo en email marketing es ponerle “cara” a la persona que envía la newsletter para aumentar la tasa de apertura de los emails.
En este caso, cuando nos referimos a ponerle “cara” hablamos del “From” de la newsletter, es decir, quién envía ese correo.
Parecerá una tontería, pero no percibimos del mismo modo un correo recibido a nombre de “Goalplan” o el nombre de la empresa, que un correo recibido a nombre de “María” o “Ana”.
Es psicología pura y dura.
Al recibir un correo a nombre de una persona concreta sentimos que ese correo es más personal. Obviamente sabemos que no somos los únicos que lo hemos recibido, pero nos da la sensación de que nos lo han escrito a nosotros personalmente y percibimos que hay una persona detrás que lo ha escrito por y para nosotros.
Por eso, no te olvides de cambiar el nombre y la dirección de correo electrónico de la persona que firma la newsletter. No queremos crear una incongruencia y un cortocircuito en la mente de los contactos que van a recibir esa newsletter cuando vean que el correo lo envía una tal “Carmen” pero lo firma un tal “Fernando”.
5. Échale “patatas” al asunto
¿Qué es lo primero que van a ver tus contactos al recibir el email?
¡Correcto! El asunto y el “preview” de la newsletter.
Tiene lógica escribir un asunto y un preview que casen con el contenido del correo, ¿verdad? Por eso es importante que no olvides modificar estos campos.
No tendría sentido enviar una newsletter acerca de esa promoción tan chula que has creado para las rebajas de verano y que el asunto de ese correo hable sobre el último post que has colgado en tu blog.
Una de las ventajas que nos ofrece Mailchimp es este recuadro que veis a la derecha de la imagen en el que te da consejos para escribir el asunto de tu newsletter.
Recuerda que, para crear un asunto que capte la atención de tus contactos, debes:
- Hacerlo corto y conciso. Piensa que el espacio en el que se va a mostrar es reducido y no queremos que esa frase tan ingeniosa que se te ha ocurrido se corte por la mitad y no se entienda. Aun así, piensa que tienes el espacio del “preview” para añadir algo más de información, aunque este espacio es más propenso a ser utilizado para dejar con las ganas de saber más y hacer clic en el correo.
- Captar la atención de quién lo va a recibir. Destaca lo que creas más importante del contenido de tu newsletter, pero no caigas en los típicos tópicos. Sé ingenioso y créale la necesidad de querer abrir el correo para saber más.
- Añade algún emoticono, pero no te pases. 1 o 2 están bien para darle un toque fresco y divertido al asunto.
6. Último paso antes de aventurarnos en el diseño y contenido
Antes de adentrarte en la edición del contenido de tu newsletter, es necesario que modifiques la URL de la campaña.
Puede ser que nunca la utilices o puede ser que sí. Independientemente de ello, añade el nombre de tu newsletter a la URL de la campaña, ya que esto te servirá para realizar mediciones de resultados, compartir la campaña en redes sociales y, lo más importante, será la URL que se enlace en el mítico “Si no ves bien este correo, haz clic aquí.” que aparece en la parte superior de todas las newsletters.
7. Manos a la obra
Ahora llega lo divertido.
Abre tu diseño y comienza a modificar el contenido de tu newsletter.
Copia ese texto al que tanto cariño le has puesto, añade la imagen que tanto has tardado en encontrar, añade un CTA final súper ingenioso al que tu contacto no se pueda resistir…
¡Pero cuidado!
Recuerda cambiar:
- El título de la newsletter
- Los enlaces de las imágenes
- El enlace del CTA final
Después de haber revisado y cambiado el título de la campaña, la audiencia, el “From”, el asunto y “preview”, la URL de la campaña… No queremos fastidiarla ahora y enlazar todos los elementos de la newsletter a la web de destino equivocada. ¡Sería un desastre!
8. Testea, siempre testea
Una vez hayas tachado todos los puntos anteriores, envíate a ti y a quién veas conveniente un test de la newsletter.
El test te servirá para poder revisar cómo se ve el asunto y el preview de tu correo, cómo se ve el diseño en los diferentes navegadores y gestores de correo electrónico y, lo más importante, podrás comprobar que todos los enlaces que has añadido funcionan y dirigen al usuario a la web correcta.
Este es el paso final y la guinda del pastel antes de programar o enviar tu súper newsletter.
Lo prometido es deuda
Como te prometimos al principio de este post, aquí tienes el enlace directo para descargarte una plantilla con este checklist para que lo tengas siempre a mano cuando quieras duplicar tu próxima newsletter.
Recuerda que si necesitas ayuda o quieres lanzar una campaña de email marketing, pero no sabes cómo, puedes contactarnos y nosotros te echaremos un cable.